El “Instituto de Ciencia y Tecnología de Polímeros” fue creado en 1947 por el Patronato “Juan de la Cierva” de Investigación Científica y Técnica del CSIC como la Sección de Plásticos dentro del Instituto de Química Orgánica “Alonso-Barba” con una composición inicial de un investigador-doctor y dos becarios. 

Su primera sede fue en el edificio “Rocasolano” donde en 1952 se reorganizó como Departamento con 6 investigadores, 3 becarios y 3 ayudantes de laboratorio. Esa denominación se mantuvo hasta 1967, en que coincidiendo con el traslado al nuevo edificio en la calle Juan de la Cierva (sede actual), pasa a denominarse “Instituto de Plásticos y Caucho”, con una plantilla constituida por 16 investigadores, 5 ayudantes técnicos, 16 ayudantes y auxiliares técnicos de laboratorio y 5 administrativos, además de 28 becarios. En 1987 tiene lugar el último cambio de denominación al actual.

Actualmente su sede está situada en el campus de Serrano del CSIC en el Centro de Química Orgánica “Manuel Lora-Tamayo”, compartiendo edificio y servicios (biblioteca, RMN, espectroscopía de masas, microanálisis, almacén, salas de conferencias) con otros Institutos (Química Orgánica General y Química Médica). Debido a la falta de espacio, el Instituto ocupa algunos locales en el cercano Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información “Leonardo Torres Quevedo” y en el Centro Nacional de Investigaciones Metalúrgicas en el campus de la Ciudad Universitaria. Con una extensión de aproximadamente 2,200 m2, en la que trabajan 130 personas (65 de plantilla de las cuales 45 son investigadores), el Instituto se organiza en 5 departamentos (Física de Polímeros, Elastómeros y Aplicaciones Energéticas; Nanomateriales Poliméricos y Biomateriales; Química-Física; Química Macromolecular Aplicada; Química y Propiedades de Materiales Poliméricos) y 4 servicios (administración, caracterización y asistencia científico-técnica, mantenimiento de equipos, infraestructura e informática y promoción y divulgación).

Las actividades científicas se centran en 3 líneas de investigación principales con diversas sublíneas: Polímeros para la Vida (Polímeros activos para aplicaciones biomédicas; implantes y biocompatibilidad; Materiales poliméricos antimicrobianos; Polímeros para Medicina Regenerativa: andamios para ingeniería de tejidos; Polímeros para Terapia: dosificación controlada de fármacos); Polímeros para Energía y Medioambiente (Polímeros Naturales, Biodegradables, No-tóxicos y Autorreparables para un uso sostenible de los recursos; Estrategias de Reciclado de Polímeros para una Economía Circular; Polímeros para una Energía limpia y su almacenamiento y conversión eficaces; Polímeros para separaciones de gases y líquidos); y, Polímeros para estructuras, transporte, bienes de consumo e ingeniería (Nanocomposites Funcionales y Polímeros Nanoestructurados con Propiedades Avanzadas; Polímeros Especiales para Sensores y Aplicaciones en Ingeniería; Polímeros para la Industria del Transporte ). 

Entre los hitos científicos-técnicos más relevantes de su historia, cabe reseñar ser el primer grupo español, tanto público como privado, dedicado a la investigación en el campo de los polímeros; la organización de las primeras Exposiciones Nacionales de Plásticos y en 1974 en Madrid del XXIII Simposio Internacional sobre Macromoléculas de la IUPAC; la elaboración y edición ininterrumpida desde 1950 de la “Revista de Plásticos Modernos”, la primera revista en castellano en el campo de los polímeros; participación activa en la creación y redacción de las primeras normas españolas sobre plásticos y cauchos en colaboración con IRANOR (antigua AENOR); creación en 1959 de la Escuela de Plásticos con la impartición ininterrumpida desde entonces del Curso de Ciencia y Tecnología de Polímeros, ahora Máster Universitario de Alta Especialización en Plásticos y Caucho.